#ElPerúQueQueremos

EL AMOR A LA PATRIA

Publicado: 2011-10-01

“Tengo deberes sagrados que cumplir y los cumpliré hasta quemar el último cartucho”, estas palabras, aunque breves, encierran todo un universo de conceptos de valor, entrega y sacrificio, pero ello sólo distraería la dirección del presente ensayo, pues quiero detenerme en el concepto más sublime que se pueda rescatar de un hombre como lo fue Bolognesi: el amor a la patria.

PRIMERO

Desde niños vamos perdiendo nuestra voluntad ante las órdenes de nuestros padres, así aprendemos a obedecer y se nos hace una costumbre, nos acostumbramos a obedecer las reglas de la casa, del colegio, de los maestros, obedecemos ciega y mecánicamente las normas ciudadanas, leyes, normas, etc., como una consigna que “alguien” estableció. Se entiende que la obediencia debe ser parte de nuestra disciplina, pero entiéndase, también, que la obediencia jamás debe partir de la presión vertical de una orden estéril, sino más bien, debe nacer de la voluntad del individuo, de una orden dada por nuestra conciencia que nos desligue de toda duda, que nos permita alcanzar la libertad creadora para poder ofrecer alternativas que retiren cualquier obstáculo de nuestro camino al objetivo final.

Obedecer a nuestra conciencia se hace urgente cuando comprendemos el verdadero significado de la palabra LIBERTAD. Comprender es abarcar un concepto con sabiduría, es liberarse del intelectualismo, las costumbres y tradiciones, que aunque útiles para una convivencia pacífica, quedan derrotadas a los pies de nuestra conciencia que nos dicta, de manera asertiva, los pasos lúcidos que debemos seguir.

Bolognesi jamás sintió las órdenes del Contralmirante Lizardo Montero como una sentencia que limite su voluntad, no era necesario, ya que él hizo suya la voluntad de Montero, la comprensión de Bolognesi estaba más allá de cualquier orden.

SEGUNDO

A la cinco de la tarde, aproximadamente, del 26 de mayo de 1880, Bolognesi ya sabía de la derrota acontecida en Tacna y se prestaba decidido a defender la plaza de Arica, así lo demuestra los telegramas que se mandó a Montero. El primero de estos telegramas, es bueno conocerlo, que a la letra dice:

Arica, mayo 26 de 1880

Señor General Montero

Pachía

Dice el coronel Bolognesi que aquí sucumbiremos todos antes de entregar Arica. Háganos propios, comuníquenos órdenes y noticias del ejército y de los auxilios de Moquegua.

Manuel C. de la Torre

Jefe de Estado Mayor

Jamás se obtuvo respuestas a estos telegramas, nunca Montero, el Estado o el gobierno contestaron, al ver que el sur estaba perdido le dieron la espalda a Bolognesi y a sus hombres. El 3 de junio manda otro telegrama, esta vez a Leiva, pensando que venía con su tropa como refuerzo le dice: “…apúrese Leiva para unírsenos. Resistiremos”. Esta vez Bolognesi se supo solo y se dedicó a preparar a su gente.

Bolognesi y sus oficiales entendieron que cualquier estrategia contra el ataque chileno sería inútil, cualquier movimiento sería disminuido por la fuerza chilena, más ahora que no contarían con apoyo aliado.

¿Cómo se puede explicar, entonces, que Bolognesi sacrificara su vida en titánica acción por defender Arica? ¿Qué lleva a este hombre a entregarse en holocausto?

Es claro que cuesta comprender esto, pues nuestros mayores esfuerzos están destinados a intereses más personales de alcanzar una vida cómoda lejos de cualquier problema. Bolognesi vio el escenario en aquel momento de otra manera.

TERCERO

El amor a nuestros padres es algo natural, haríamos cualquier cosa por el bien de ellos, por nuestros hijos hasta daríamos la vida, pero por nuestra patria qué hacemos. La falta de amor nos llena de miedo, de apasionamientos, odio, dependencia psicológica, etc. pero la persona que ama procura el bienestar del ser amado, destruye su propio egoísmo para entregarse por completo a esa persona, hay veces que sacrifica sus propios intereses aún a costa de su vida. Ese amor sincero, humilde, sin condiciones es el que Bolognesi sentía por su patria, al ver que ésta era desgajada entre las fauces del enemigo no midió consecuencias, y se lanzó a defenderla como un hijo a su madre.

El deber sagrado de un hijo es defender a la madre, pero los gobernantes de turno no pudieron ver esto en Bolognesi, como hijos ingratos dejaron que se desangrara el sur.

Por momentos parece injusta la historia, pero de haberse prestado la ayuda que Bolognesi requería, nunca hubiéramos conocido la magnitud de lo que es capaz el sacrificio humano, no tendríamos el ejemplo que guíe nuestro deber para con nuestra patria, “hasta quemar el último cartucho” dijo, este el ejemplo que debemos tomar ante las circunstancias difíciles y aunque parezcan las más adversas, siempre existe una solución airosa, no importa que nuestro nombre quede postergado anónimamente lo importante es la patria.

CUARTO

La historia no se escribe sólo describiendo los hechos pasados y las memorias, sino también vivenciando el patriotismo cada día de nuestras vidas con nuestros actos, nuestros pensamientos y nuestros sentimientos que deben apuntar a la libertad de los pueblos.

Sólo experimentando por sí mismos eso que se llama amor, seremos capaces de proteger la libertad de nuestra gente, el egoísmo se rinde ante el amor a la patria y nos conduce impersonalmente a engrandecerla.

La libertad es inherente a la voluntad del hombre, es la consigna que Dios ha grabado en nuestra conciencia, porque la libertad es romper las cadenas que nos atan a nuestras derrotas y fracasos.

Ser libres es sobreponerse a todo obstáculo para enaltecer la gloria de nuestro propio Ser y la Patria.

Las palabras de Bolognesi deben estar presentes cada vez que pensamos en nuestra más sagrada tarea: EL PERÚ.


Escrito por

reinaldo de la cruz

Nació en 1972, de niño trabajaba jugando y los ratos de ocio iba al colegio, hoy sigue jugando y es docente solo porque se tituló.


Publicado en

PRINCIPIO DEL ARTE

Otro blog más de Lamula.pe